Los que Vigilan desde el Tiempo y Otros Cuentos

No cabe duda de que a August Derleth hay que achacarle muchas cosas, entre ellas la explotación de toda la obra de H.P. Lovecraft desde la muerte de éste. Derleth fue un adepto de Lovecraft, un miembro de su círculo más íntimo, lo que le permitió (junto a Donald Wandrei), hacerse con todos sus papeles, novelas y esbozos. Y bien sabemos que lo aprovechó, porque no sólo publicó toda su obra conocida sino que también se dedicó a dar forma y a terminar cualquier esbozo que encontró del Maestro.

Aunque la perspectiva de Derleth respecto a la obra de Lovecraft era más económica que otra cosa, también le debemos mucho. Él acuñó el término "Mitos de Cthulhu" y promovió que otros escritores contribuyesen con sus relatos a la riqueza de este mundo. Pero por otra parte, también desvirtuó en buena medida la visión cósmica que tenía Lovecraft de su obra. Éste escribía sobre unos seres que dominaron la Tierra hace millones de años, para desaparecer posteriormente. Pero siguen ahí, pueden volver en cualquier momento; los seres humanos no significan nada para ellos, menos que nada; y todo aquél que intenté entrar en contacto con ellos, acabará mal parado. Sin embargo, Derleth diferencia a estos seres en buenos y malos, como si realmente les importasen los pobres humanos, y se centra demasiado en etiquetarlos.

Los cuentos de este volumen fueron escritos casi en su totalidad por Derleth, basándose en lo encontrado entre los papeles de Lovecraft. Aunque parece ser que 'El que acecha en el umbral' sí que lo dejó más perfilado. El resto se pueden adjudicar a Derleth, pero esto es algo que nunca sabremos. El último cuento, 'Los que vigilan desde el tiempo', está inconcluso por la muerte de Derleth en 1971.

Al acabar de leer este libro me queda la sensanción como si le faltase algo. Los relatos están bien escritos y documentados, y contienen todo aquello que destaca del mundo lovecraftiano, pero no llegan a crear esa atmósfera inquietante tan característica.

Estos son los cuentos contentidos en el libro:

- EL QUE ACECHA EN EL UMBRAL (The Lurker at the Threshold) (***). En Arkham se encuentran unas tierras pertenecientes a los Billington, y que han sido heredadas por Ambrose Dewart. Tras tantos años sin habitar, Ambrose se ha propuesto rehabilitar la finca, algo que ha alterado a toda la comarca, ya que el apellido Billington es de infausto recuerdo. Reconociendo las tierras, Ambrose da con una torre rodeada por un círculo de piedras. Entonces se propone averiguar todo lo posible sobre su antepasado Alijah, leyendo los libros y papeles de la casa y consultando en universidades, así como entrevistando a los vecinos. Lo que descubre es terrorífico... y emocionante, para su desgracia. Buena novela corta, o relato largo, con muchos ingredientes de lo mejor de Lovecraft.

- LA SOMBRA DEL DESVÁN (The Shadow in the Atic) (**). Para poder heredar la casa de su tío abuelo Uriah Garrison, Adam ha de vivir en ella durante noventa días seguidos. Extraña cláusula del testamento a la que Adam accede. En el ambiente se nota una amenaza, que Adam parece no sentir pero su novia sí. Este relato no contiene casi nada del mundo de Lovecraft, es más un cuento típico de terror.

- ARCILLA DE INNSMOUTH (Innsmouth Clay) (**). El narrador nos cuenta la extraña desaparición del escultor Jeffrey Corey. A través de sus notas vamos conociendo el enigma. Lo último en lo que trabajaba llevaba por nombre "Diosa Marina", realizada con una arcilla azul que fue arrastrada hasta la orilla. Un cuento algo irregular, que podría haber dado más de sí.

- LOS QUE VIGILAN DESDE EL TIEMPO (The Watchers out of Time) (**). Nicholas Walters ha heredado la hacienda de los Whateley, en la zona de Dunwich. Cuando visita la casa, se da cuenta de algo extraño: parece que haya sido construida alrededor de la habitación central. Entonces se decide a investigar sobre sus antepasados. Y cuando más interesante se ponía el cuento, se termina, porque August Derleth falleció antes de terminarlo.